El ruido nos afecta más de lo que nos podamos imaginar. Los efectos que no son inmedatos son los más dificiles de prevenir porque, aunque se advierta de ello en repetidas ocasiones, no se le da la verdadera importancia que tiene.

Un efecto evidente, y que está totalmente documentado, de la exposición rutinaria al ruido es la pérdida de sensibilidad auditiva. El nivel de pérdida va a depender de cada caso ya que influye tanto el nivel de presión acústica como el tiempo de exposición. No es igual el que somete una vez a la semana a su audición a niveles sonoros elevados que el que lo hace todos los días. Evidentemente perderá más audición el segundo caso. Lo que ocurrirá es que lo normal es que estas personas acaben padeciendo hipoacusia por ruido.

En el Centro Auditivo de Pamplona Sancho Ramírez dispone de la protección auditiva que puede necesitar: protectores auditivos contra el ruido adaptados a diferentes actividades.

Para que los protectores auditivos puedan ser efectivos deberían estar fabricados a la medida del que los va a emplear y en función del ambiente ya que en cada caso incorporará unos filtros auditivos diferentes.